Pastelón boricua (la versión de abuela)

Plátano maduro y carne molida. ¿Qué mejor que eso?

El primer pastelón que comí en mi vida fue hecho por mi abuela materna. Honestamente no era una de mis comidas favoritas. No lo entendía. ¿Dulce con salado y con arroz blanco por el lado? ¿Qué clase de trampa era esa? Con el tiempo entendí su valor y hoy día me emociona mucho hacerlo y comerlo. Pero, claro está, tiene que ser como abuela Cana lo hace.

Primero, abuela prepara la carne molida. Le queda muy jugosita y sabrosa. Nunca he podido descifrar cómo la hace tan rica, pero he logrado acercarme un poco. Segundo, corta los plátanos maduros. Mondar plátano maduro es mucho más simple que mondar el plátano verde. No corta el plátano en rueditas como para tostones, sino que le hace dos cortes al plátano, y luego corta tiritas de forma vertical. Tercero, fríe las tiritas en aceite caliente hasta que se pongan color doradito.

Ya con los amarillos y la carne molida lista, solo resta montar el pastelón. Para esto abuela utiliza una sartén grande, huevos batidos y mantequilla. Hay quienes comparan el pastelón boricua con una lasaña porque ambos están construidos en capas. Sin embargo, hay quienes le añaden queso al pastelón y hay quienes prefieren no hacerlo. Abuela es del equipo de los que no le echan queso. Yo, en cambio, no me puedo resistir al sabor de queso derretido. Mi versión lleva queso.

Para montar el pastelón, abuela engrasa la sartén con mantequilla. Seguido, cubre todo el fondo con amarillos fritos sin dejar ni un espacio de la sartén al descubierto. Luego rellena con carne molida hasta casi el tope de la sartén. Continúa cubriendo la carne molida con otra capa de amarillos fritos sin dejar espacios de carne molida al descubierto. Para esto se asegura de colocar los amarillos con los bordes encima del otro. Finalmente, para cerrar el pastelón, termina cubriendo la última capa con huevos batidos.

Una vez está montado en la sartén, lo lleva al fuego para que el caliente de la estufa ayudé a que el pastelón tome la forma de la sartén y no se derrumbe al transpórtalo a una bandeja de servir.

Cocina el pastelón en la sartén a fuego lento hasta que comience a salir burbujas de entre las tiritas de plátano maduro. Cuando la capa de huevos batidos se solidifica un poco, coloca un plato amplio sobre la sartén y voltea de forma que la capa inferior ahora quede al tope. Vuelve a transportar el pastelón a la sartén con la capa de huevos batidos hacia el fondo. Cocina por un minuto. Ahora solo quieres que los huevos se terminen de cocinar. Apaga el fuego y transporta al plato de servir.

Puedes servirlo así, o puedes colocar una capa de tu queso favorito al tope y esperar a que el calor del pastelón lo derrita (también puedes utilizar una antorcha de cocina para acelerar derretir el queso).

Sirve rápidamente. Puedes acompañar con alguna ensalada o arroz blanco.

¿Qué te pareció esta versión? ¿Cómo lo haces tú?