Cheesecake de Café

¡Feliz Día Internacional del Cheesecake!

Si hay algo que merece celebración es la creatividad humana guiada por la necesidad y el paladar. Hoy celebramos el cheesecake y la mente (o mentes) maestras detrás de tan preciado tesoro. Que la tierra los bendiga, la humanidad les agradece.

En honor a este día, que para muchos debería ser feriado, preparé un Cheesecake de café que tenía un 60% de probabilidad de fracasar, pero que venció las adversidades. Les cuento.

El problema, una vez más, fue por mi relación antagónica con el horno de la casa donde ahora me hospedo. No logro entenderlo. Se me complica la vida cuando me toca ajustarle la temperatura. Se le borraron los números alrededor del mango de la temperatura. Para resolver ese problema compré un termómetro para horno, pero ya lo perdí. Se esfumó. Seguro pensó que su desaparición sería un buen tema de reflexión para Jengibre. Y aquí estoy, escribiéndolo. Eso logra liberar un poco mi ira. Al fondo le estoy agradecida.

En fin, voy al grano. Jugué mucho con la temperatura porque no estaba segura si estaba muy caliente o no lo suficiente. Cuando lo saqué del horno el cheesecake se desinfló. Vi eso pasar en cámara lenta y mi alma como que también se desinflo. ¡Qué dolor! Igual lo dejé enfriar y lo decoré. Aunque sea pa' la foto, pensé. Pero mis roommates y yo lo devoramos. ¡Qué cosa más sabrosa! Aquí les dejo la receta.

**PS. Si dominas el arte del cheesecake, por favor, comenta o escríbeme. Necesito tu sabiduría.

Ingredientes:

A. Para el crust

- 9 onzas de Vanilla Wafers

- 1/2 taza (una barra) de mantequilla

B. Para el cheesecake

- 3 barras de 8 onzas de queso crema (24 onzas en total)

- 1 taza de azúcar regular

- 3/4 taza (6 onzas) de crema espesa (heavy cream)

- 3 cucharaditas de café instantáneo

- 1 cucharadita de extracto vainilla

- 3 huevos

C. Decoración

- 1/2 taza de chispas de chocolate (semisweet chocolate chips)

- 2 cucharadas de aceite de coco

- 1 taza de crema espesa

- 1 1/2 taza de azúcar en polvo

- 2 cucharaditas de café instantáneo

Procedimiento:

- Calienta el horno a 350 grados F.

- Prepara tu molde desmontable de 8" de diámetro.

A. Para el crust

- Tritura las vanilla wafers. La manera más conveniente es usando un procesador de alimentos. Asegúrate de que el procesador de alimentos esté completamente seco, esto evitará crear grumos o dificultar el proceso de puré.

- Una vez tritures tus galletas, transpórtalas a un bowl completamente seco.

- Mientras trituras las galletas, derrite tu barra de mantequilla a temperatura baja. No la dejes hervir, solo derrítela. Retira del fuego.

- Vierte la mantequilla derretida sobre las galletas en polvo y mezcla. Crea una pasta, puedes usar una espátula, una cuchara, o tus manos.

- Echa la mezcla de galletas y mantequilla al centro de tu molde desmontable. Presiona con tus manos hasta que la mezcla cubra el fondo del molde. Guarda aparte.

B. Para el Cheesecake

- Asegúrate de que las barras de queso crema estén a temperatura ambiente para un fácil batido.

- Calienta la crema espesa en el microondas por 30 segundos. Vierte las tres cucharaditas de café instantáneo y disuelve mezclando con una cuchara. Guarda aparte hasta que alcance temperatura ambiente nuevamente.

- Bate el queso crema con una batidora eléctrica a velocidad media hasta obtener una crema.

- Añade el azúcar y bate hasta incorporar.

- Cuando la crema espesa con café esté a temperatura ambiente, intégralo a la mezcla principal de queso y azúcar. Incorpora poco a poco sin dejar de batir para evitar grumos.

- Echa la esencia de vainilla. Mezcla.

- En un bowl aparte, bate los tres huevos a velocidad máxima hasta que tengan muchas burbujas o duplique en cantidad.

- Vierte los huevos, poco a poco, en el bowl de la mezcla principal sin dejar de batir. Para este paso puedes usar una espátula y hacer movimientos envolventes y delicados.

- Engrasa los lados del molde donde no hay galleta (las paredes del molde).

- Vierte la mezcla en el molde.

- Con la espalda de tu espátula propaga la mezcla creando una capa bien bonita.

- Cubre el fondo del molde por la parte exterior con papel de aluminio. Coloca el molde (Ahora cubierto con aluminio) sobre una bandeja para galletas o un molde más amplio que pueda sostener una leve capa de agua.

- Llévalo al horno por una hora.

- Apaga el horno y deja el cheesecake dentro por 30 minutos más. Luego sácalo y déjalo reposar hasta alcanzar temperatura ambiente.

- Termina de enfriar tu cheesecake en la nevera por al menos 5 horas antes de servir.

C. Decoración

- Derrite las chispas de chocolate con el aceite de coco en el microondas por 1 minuto. El envase para derretir el chocolate, así como la cuchara para mezclarlo, deben estár completamente secos. De lo contrario la humedad hará que se solidifique el chocolate.

- Vierte el chocolate derretido sobre el cheesecake frío. Riega por toda la superficie creando una capa de chocolate. Deja enfriar hasta que endurezca.

- En un bowl amplio mezcla la crema espesa con el café instantáneo hasta que se disuelva completamente.

- Para el whipped cream, añade el azúcar en polvo y bate a velocidad máxima hasta que solidifique. No sobre mezcles porque la mezcla se romperá y terminarás con mantequilla en vez de whipped cream.

- Para decorar con el whipped cream, puedes usar una manga de decoración con la punta de estrella. De no tenerlo, puedes usar una bolsita ziploc y hacerle una abertura amplia en una de sus puntas.

- Decora el chessecake con whipped cream al borde superior.

- Para servir, deja tu cuchillo bajo un chorrito de agua bien caliente. Seca el agua, pero manten el cuchillo caliente. De esta forma será fácil cortar la capa de chocolate sin romper toda la corteza. Sé delicado al cortar el cheesecake.

- ¡Disfruta!